El casco para patinar

El casco, al igual que todas las protecciones para patinar es importante, especialmente si estás aprendiendo a hacerlo, pues las caídas serán parte de tu aprendizaje.

Foto tomada de: http://tuningpp.com/

 En mi caso, patinar es mucho más que dar un paseo, así que me he permitido atrevimientos para ir más allá de un simple rodaje y aprender a realizar muchas cosas, lo propio de una práctica de Freeride. Entonces, según la frecuencia de uso (cantidad de caídas), las protecciones más indispensables han sido: 1) muñequeras y rodilleras 2) coderas, rara vez las he requerido y 3) casco, sólo una vez lo he necesitado.

Como verás, el casco es lo que menos se utiliza, pero es la pieza clave que puede salvarte de una contusión grave o hasta de la muerte. Corazón y cerebro son prioritarios. Si valoras patinar, ponte el casco ¡Qué no te patine el coco!

Hay rollers que deciden prescindir de ellos, porque quieren dar la impresión de ser profesionales, de estar muy curtidos en el patinaje, o porque las heridas y soportar el dolor les hacen ver más grandes. Es cuestión de qué valoras más: tu cuerpo y tu vida o el patinaje. Si valoras todo esto sabrás que para seguir patinando a diario debes usar los protectores, de lo contrario, el masoquismo, que bien te ganará admiración, un día podría separarte de los patines.

¿Qué tipos de cascos para patinar existen?

a) Cascos para Fitness y/o Velocidad.

Estos cascos tienen una forma alargada, con múltiples aberturas de manera longitudinal para aumentar la ventilación y están diseñados para recibir un único impacto fuerte, por lo que luego de eso deberás cambiarlo. El de Fitness puede incluso tener una visera.

b) Cascos para Freeskate y Agresivo.

Tienen una forma más redondeada, cubren más la parte trasera de la cabeza, la frente y el contorno de las orejas. Ofrecen una menor ventilación, pero a cambio están diseñados para recibir múltiples impactos.

c) Cascos multipropósito.

Son muy parecidos a los de Freeskate, pero cubren menos la frente. Pueden utilizarse en muchos deportes o actividades y suelen ser más resistentes a los impactos.

d) Cascos integrales.

Cubren toda la cabeza, incluyendo la cara, con ventilación casi nula, de manera que son idénticos a los que se utilizan para motos. En el patinaje están destinados a los descensos (Downhill) y actividades extremas.

e) Cascos para Hockey.

Ofrecen una mayor protección contra golpes e impactos, están reforzados en la frente y laterales y cubren parcialmente las orejas.

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Otro elemento que suele ser muy importante al momento de elegir un casco es su ventilación; independientemente de la finalidad, los seres humanos necesitamos que el cerebro se mantenga a una temperatura adecuada y estable, por lo que mucho calor afectará a tu organismo. Algunas veces he escuchado a algunas personas hablar del color adecuado del casco, y contraindican el color negro porque según ellos concentra más calor en la cabeza. En realidad, si nos remitimos a los hechos, la tecnología Stealth (o tecnología furtiva) empleada en aviones que evaden radares, incorpora el color negro casi de manera absoluta, lo cual, a altas velocidades donde se genera una gran fricción al aire y por ende aumento del calor sería impensable, pero la razón es sencilla: Comprobaron que el color negro absorve con mayor facilidad las radiaciones solares, pero en cambio disipa más rápido el calor. Entonces, si tienes algo en contra de este color, tal vez es hora de que lo vayas pensando mejor. A fin de cuentas, si patinas a mediodía con un casco de Freeskate, al cabo de una hora sentirás que se te cocina la cabeza, pero difícilmente notarás una diferencia respecto al color del casco.

¿Cómo seleccionar un casco apropiado?

1) Toma una cintra métrica y mide tu cabeza como se muestra en la imagen.

2) De acuerdo a la medida que resulte, selecciona la talla de casco que necesitas. Si la medida fuera, por ejemplo, 54.3cm entonces escoge la talla inmediatamente superior, es decir, talla 56 o S.

Medida (cm)	Talla	Equivalencia
52-53	52	XXS
53-54	54	XS
55-56	56	S
57-58	58	M
59-60	60	L
61-62	62	XL
63-64	64	XXL

MMM

3) Una vez que tengas el casco, éste tiene que quedarte justo: ni flojo, ni apretado. Si puedes meter tus dedos entre el casco y la frente, o si él casco puede moverse de alguna manera, está flojo. Si te cuesta ponértelo, te aprieta o te produce molestias, tampoco es tu medida.

4) Si te aprieta retira alguna de las almohadillas o colócale las de la talla inferior. Si está muy flojo, prueba con las almohadillas más gruesas. Si no logras ajustar bien el casco, prueba con otra talla.

5) Si ya lo tienes a medida, abrocha la hebilla y ajústala a la medida de tu quijada, sin apretar y sin que quede floja. El casco no debe safarse de tu cabeza mientras esté bien sujeto.

6) Un detalle importante a la hora de seleccionar un casco de Freeskate es que éste te cubra efectivamente la frente. Como referencia lo ideal sería que el borde del casco se ubique un dedo por encima del contorno de las cejas. Esto no debe ser una limitante, pero tómalo en cuenta para escoger un buen casco.